Poemas
El hombre y la sombra
Cuenta la historia, que el HOMBRE era noble por naturaleza. Tenía un corazón lleno de AMOR. El destino CELOSO, escondió su TERNURA en la cara oculta de la LUNA. Y de recuerdo le dejó, su SOMBRA.
Desde entonces, el HOMBRE, el AMOR y la SOMBRA son inseparables. Caminan juntos en busca de un final feliz.
Mensajeros del universo
Cuenta la leyenda que a la hora más oscura, que es la que precede al alba. Cuando todo es muy oscuro y te preguntes ¿Adónde está el rayo de luz? Mágicamente, los rayos del sol comenzarán asomar desde un lugar desconocido. Y en cada rayo del sol, los mensajeros del universo traerán rayitos de luz y conocimiento colmando nuestras almas de paz interior y sabiduría universal.
Entonces nosotros, los mismos de antes, ahora espíritus vivientes, nos alimentaremos de la energía universal y atravesaremos puertas cerradas que desean ser abiertas.
El infiel y sus virtudes
Dame un motivo para no quererte y te nombro diez virtudes por las que yo te amo.
-Soy infiel… Respondió él, esperando escuchar gritos mientras se iba.
- No te marches que ya te he oído. Dijo ella y le nombro sus virtudes y continúo.
Te amo por decir la VERDAD, por tu ESPONTANEIDAD, tu FRANQUEZA. Por amar tú LIBERTAD, porque eres LEAL y leal se le es a un amigo mientras que FIEL se le es al amante. Por ser TOLERANTE, por tu SENCILLEZ y mostrarte como eres. Por tu HUMILDAD al reconocer tus propios defectos y errores, por tu AMISTAD que es autentica, clara y desinteresada.
El infiel escuchó atentamente cada una de sus virtudes, tan ocultas y desconocidas por él. En silencio lloró y agradeció, aunque ella jamás se enteró.
Desde siempre, la lealtad y la fidelidad han caminado juntas pero no a la par.
Pequeño y gigante
Era pequeño a la vez, gigante.
Era tan pequeño, que causaba dulzura y ternura, mirarlo,
y daba un poco de miedo observarlo, como todos los gigantes.
Con ternura crece y se convierte en el mejor de los gigantes,
capaz de domar a la bestia más temible de todos los tiempos.
El pequeño gigante tiene nombre de hombre, y se llama amor.