Poemas

02/04/2013 17:38

 

MANANTIAL

 

En tu piel de musa

descansó mi errancia

sus pesares.

 

Origen del poema,

tu vientre,

hizo añicos lo incierto

fecundando el aire.

 

Asombrada

de guijarros rumorosos

de tu boca

subiò el canto

hasta la raìz

del alma mìa.

 

Bebì

de tus senos

la libertad que supo

descubrirme

hembra una mañana.

 

A manzana y luna

sabìan

tus pezones.

A mujer entera.

Sabìan a ternura.

 

Con dorado hilo

el terciopelo.

viò brillar

tu rastro

enaltecido.

 

Enmudeciò la noche

en lo profundo de tus ojos

 

Escandalizaste al sol,

fanal de luz,

resplandeciente 

y tibio.

 

Oculta la pena

tras la cornisa de tu talle

nunca pudo

parirse tristeza…

Hasta tu marcha.

 

Fue entonces

cuando la madera

de tu esencia

reverdeciò

en las guedejas

de tu  estampa.

 

Odas

se escribieron

incansables

repitièndote.

 

Còmplice amiga,

noble proceder,

almizcle y menta.

Pàjaro gràcil,

jazmìn y hiedra.

 

Roca antigua

de bravura indòmita

Morena mbareté*

mi vieja.

 

Aparejo mis naves

en la embocadura

de tu nombre.

Empalmo mis aguas

en tu rìo.

Oteo horizontes

en busca

de tu paso

 

y echo a navegar,

desde tus alas,

mi propio destino.

 

        Gina Escobar

Oberá Misiones.Argentina

 

VICTORIA FINAL
A los combatientes de Malvinas
Mar azul
blancos en destello
en el aire flota
una metáfora de bandera.
Los niños beben en ella
y desandan su rastro
de ángel incorpóreo
Lastimadas sus alas
sin blindaje
en el peñón descarnado
de las islas.
La utopía
huele a pólvora
entre los hombres sin meta.
Esos
que conducen a los niños
por las cornisas de la muerte.
Esos
que vomitan su odio
engrosando helados cementerios.
Ellos siguen,
sin embargo,
tras un sueño
que los lleva
hechos jirones,
desgastados.
En sus ojos
una novia,una madre,
una patria.
Certera,
la muerte reclama
para su hermana ,
la locura,
algunas sobras
que no pudo segar
en la rapiña.
Pero ellos
siguen…
esquivando presagios,
alucinando auroras desde el iris
siguen
Nada los detiene
Por las playas pedregosas
por la sal
el agua
el aire
persistirán en su batalla
a pesar de las estatuas
y las flores
a pesar del cínico homenaje
a pesar de las calles sin sus nombres
a pesar del hueco en la memoria
porque la victoria
es el germen que los mueve
y no se vence
a quienes no se rinden.

GINA ESCOBAR
Oberá-2006